La quiropráctica es una terapia manual que se centra en la relación entre la columna vertebral y el sistema nervioso. Te contamos todo lo que necesitas saber sobre esta alternativa terapéutica.
¿Qué es la quiropráctica?
La quiropráctica es una disciplina que tiene una premisa muy simple, ya que aborda la salud desde el funcionamiento de la columna vertebral, convirtiéndose en una de las terapias alternativas más requeridas en los últimos años, así como una de las más famosas en redes sociales donde habitualmente podemos ver cientos de videos con especialistas que hacen sonar huesos y articulaciones.
Si sufres de dolores crónicos o lesiones, es probable que alguna vez hayas considerado visitar a un quiropráctico. Sin embargo, es común tener dudas sobre en qué consiste exactamente esta práctica y si podría ser beneficiosa en tu caso.
Para despejar todas las dudas y darte una idea clara de lo que se trata esta medicina alternativa es que acá en Revista Esotérica te contamos todo lo que necesitas saber sobre los orígenes, fundamentos, técnicas y posibles beneficios de la quiropráctica, para que decidas si vale la pena probarla.
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Origen de la quiropráctica: una historia peculiar
Para entender esta disciplina, primero debemos remontarnos a sus orígenes. La quiropráctica fue fundada en 1895 por Daniel David Palmer en la ciudad de Davenport, Iowa, Estados Unidos.
La historia cuenta que Palmer, quien tenía formación en las áreas de anatomía y fisiología pero no era médico, logró curar nada más ni nada menos que la sordera de un conserje después de manipular su columna vertebral. Fue luego de este aparente éxito que Palmer desarrolló sus teorías sobre la relación entre la alineación de la columna y la salud en general del ser humano.
De ese episodio fue que nació la quiropráctica, que tomó su nombre del griego "quiro", (χειρ, χειρός) que significa "mano", y "paxis"(πράξις ) que significa "práctica" y por tanto la palabra significa "hecho manualmente".
Como buen iniciador de su propia disciplina Palmer estableció la primera escuela para enseñar estas técnicas en 1897. Con el tiempo, la disciplina ganó adeptos y regulaciones para su práctica legal llegando a ser una de las terapias alternativas más famosas.
Hoy en día la quiropráctica es una profesión establecida en muchos países, aunque sigue considerándose una terapia alternativa o complementaria, y se ha popularizado rápidamente en los últimos años.
Qué plantea la quiropráctica sobre la salud
Partamos de la base de que la premisa central de la quiropráctica es que una alineación adecuada de la columna vertebral permite una óptima comunicación entre el cerebro y el resto del cuerpo a través del sistema nervioso central.
A partir de esa premisa es que los quiroprácticos trabajan sobre lo que denominan la relación entre la estructura del cuerpo (principalmente columna) y la función del cuerpo. Con eso en mente es que manipulan areas específicas de la columna con el objetivo de corregir posibles desalineaciones que estén causando problemas de salud.
Es precisamente esta premisa básica de la quiropráctica lo que difiere de la medicina tradicional, ya que esta últia ve la columna desde una perspectiva más mecánica y no le da tanta relevancia en la funcionalidad global del organismo.
Para qué se utiliza la quiropráctica
De acuerdo a la teoría quiropráctica, su principal función es la de corregir desalineaciones en la columna y con ello es que puede aliviar diversos problemas de salud, entre los que se incluyen los siguientes:
- Dolores de espalda y cuello
- Ciática
- Dolores de cabeza y migrañas
- Artritis
- Problemas digestivos
- Fibromialgia
- Síndrome del túnel carpiano
- Lesiones deportivas
Al realinear vértebras específicas, se busca restablecer y optimizar la comunicación nerviosa, mejorar la movilidad articular y aliviar síntomas como la inflamación y el dolor.
Si bien no existe consenso científico sobre su efectividad, muchos pacientes reportan beneficios con la quiropráctica para tratar dolencias musculoesqueléticas. Algunos estudios indican que puede ser útil como terapia complementaria.
Qué ocurre durante una consulta quiropráctica
Lo más importante es la evaluación de cada paciente. Por ello es que durante la primera visita, el especialista realiza un examen físico completo y una evaluación de tu columna vertebral y articulaciones. Puede utilizar rayos X u otras imágenes para detectar posibles desalineaciones.
En base a esto, desarrolla un plan de tratamiento que puede incluir:
- Manipulación manual de la columna: el quiropráctico utiliza técnicas específicas de ajuste con sus manos o con instrumentos para restaurar el movimiento de las vértebras. Esto puede generar un sonido de "pop".
- Movilización de articulaciones: estiramientos suaves y masajes para mejorar el rango de movimiento.
- Terapias físicas: uso de calor, frío, ultrasonido o láser para disminuir el dolor.
- Ejercicios terapéuticos: el especialista recomienda rutinas para fortalecer músculos, mejorar postura y prevenir nuevas lesiones.
- Consejos ergonómicos: adaptar muebles, colchones y hábitos posturales para proteger la columna.
Las sesiones suelen tener una duración de 30 a 60 minutos y se recomiendan con regularidad al inicio del tratamiento. Luego se establecen controles periódicos.
Consejos antes de probar la quiropráctica
Si estás considerando esta terapia complementaria, ten en cuenta estos consejos:
- Busca un quiropráctico titulado y con licencia vigente para asegurar que tiene la capacitación adecuada.
- Pregunta sobre las técnicas específicas que emplea y si tiene experiencia con casos como el tuyo.
- Informa sobre cualquier lesión previa, enfermedades que padezcas y medicamentos que tomes, para evitar complicaciones.
- Ten expectativas realistas sobre los resultados. La quiropráctica puede complementar, más no reemplazar, tratamientos médicos indicados.
- Acude a las citas recomendadas para completar el proceso de realineación. Los ajustes pueden requerir varias sesiones.
- Hidrátate bien antes y después de cada visita.
- Si sientes algún malestar o dolor intenso, comunícalo de inmediato al profesional.
Con paciencia y bajo supervisión adecuada, la quiropráctica puede convertirse en parte de un estilo de vida saludable. Pero antes de iniciar cualquier terapia, siempre es recomendable consultar con tu médico de confianza.
Infografía: Quiropráctica
