La estructura del Horton Grand Hotel se remonta a la época victoriana. Tiene 4 pisos, 110 habitaciones y 24 suites donde las camas se sacuden y se ven pasar cordiales fantasmas de tiempos remotos.
El Gran Hotel Horton, ubicado en San Diego, California, emerge como un fascinante crisol de historia y fenómenos paranormales.
Este hotel de la época victoriana, con su majestuosa estructura que alberga 110 habitaciones y 24 suites, cuenta con una rica historia que se entrelaza con la restauración de dos antiguos hoteles, el Grand Horton Hotel y el Brooklyn Kahle Saddlery Hotel.
Vamos a explorar tanto la historia de este majestuoso hotel como los enigmáticos fenómenos paranormales que lo rodean.
El Renacimiento de dos Hoteles Históricos
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El contexto histórico de San Diego en la década de 1880
En 1886, San Diego vivía una época de crecimiento demográfico impulsado por la conexión del ferrocarril transcontinental en 1885.
Este auge condujo a la construcción de varios hoteles, entre ellos el Grand Horton Hotel y el Hotel Brooklyn.
Ambos fueron erigidos en áreas respetables, alejados del salvaje distrito Stingaree, que albergaba actividades tan controvertidas como salones, salas de juego y burdeles.
La restauración de los Hoteles: Un proyecto de reinvención
A medida que los años pasaban, ambos hoteles cambiaron de dueño en múltiples ocasiones y cayeron en desuso.
Sin embargo, la ciudad de San Diego, comprometida con la preservación de su historia, tomó medidas para salvar estos edificios.
En 1970, ambos hoteles enfrentaron la posibilidad de demolición, pero la ciudad, en un acto de preservación, vendió partes renovables de los edificios por un dólar a un inversor privado.
Más de 10,000 piezas fueron meticulosamente catalogadas y almacenadas para una futura reconstrucción.
El renacimiento del Gran Hotel Horton
En 1986, se inició un ambicioso proyecto de reconstrucción que fusionó los elementos estructurales de los dos antiguos hoteles para dar lugar al majestuoso Gran Hotel Horton.
Esta renovación cuidadosa incluyó la restauración de la impresionante escalera de roble de 100 años del Grand Horton Hotel, enviada a Austria para su reparación y restauración a un costo significativo.
Al ingresar al hotel, los visitantes son recibidos por una mezcla de elegancia victoriana y detalles históricos.
El área cercana a la recepción, que solía ser la tienda de monturas y arneses, ahora presenta un caballo de papel maché que alguna vez fue la mascota publicitaria original.
La gran escalera de roble lleva a los visitantes a través de distintos pisos, cada uno decorado de manera única con antigüedades, y muchas habitaciones cuentan con ventanas originales tomadas de los hoteles originales.
Fenómenos paranormales en el Gran Hotel Horton
La habitación 309 y el misterioso Roger Whitaker
La historia de Roger Whitaker, cuyo espíritu se cree que ronda la habitación 309 y su pasillo, añade un toque de misterio al Gran Hotel Horton.
Dos relatos diferentes explican la presencia de su fantasma.
Según uno, Roger fue asesinado en 1843 por el padre del amor de su vida.
Otro relato sugiere que un jugador con mala suerte murió en la habitación 309 tras ser sorprendido haciendo trampas.
Independientemente de la versión, los testigos afirman haber visto a Roger, siendo educado pero recordando a los vivos de su presencia.
Espíritus desconocidos y jugadores de cartas
Además de Roger Whitaker, varios espíritus desconocidos parecen acechar gentilmente el Gran Hotel Horton.
Estos fantasmas son descritos como educados y amigables, coexistiendo pacíficamente con los vivos.
La habitación 309 se convierte en el escenario de múltiples fenómenos paranormales, desde camas que se sacuden hasta luces que tienen voluntad propia.
El espíritu de señora Ida Bailey y la gran escalera
Se dice que el espíritu de la señora Ida Bailey, vinculada al antiguo burdel que ocupaba la ubicación del hotel, contribuye a la bienvenida atmósfera del Gran Hotel Horton.
Una noche memorable, un visitante fue testigo de un grupo de espíritus vestidos con atuendos formales de la década de 1880 flotando por la gran escalera del hotel.
Testimonios y experiencias sobrenaturales
Relatos de huéspedes intrigantes
Los huéspedes que han ocupado la habitación 309 cuentan experiencias fascinantes, desde camas que se sacuden en medio de la noche hasta la apertura misteriosa de puertas de armarios.
Las luces que se encienden y apagan por sí solas, objetos que se mueven sin explicación aparente y la temperatura de la habitación que varía sin razón evidente son parte de los fenómenos que desconciertan a aquellos que eligen hospedarse en este emblemático lugar.
Encuentros con Roger Whitaker y Otras Apariciones
Roger Whitaker, en particular, ha realizado numerosas apariciones. Testigos aseguran haberlo visto en pasillos y habitaciones, interactuando de manera sorprendentemente realista.
Desde preguntas sobre la ubicación de la máquina de hielo hasta apariciones inexplicables, los encuentros con Roger dejan a los visitantes con una mezcla de sorpresa y asombro.
