Desde las visiones proféticas de los oráculos en la antigua Grecia hasta la exploración de dimensiones espirituales en prácticas contemporáneas, la clarividencia continúa siendo un misterio que desafía las explicaciones convencionales.
La clarividencia, un término que ha fascinado a la humanidad a lo largo de la historia, se presenta como una capacidad misteriosa que trasciende los límites de la percepción ordinaria.
Derivada del latín "clair" (claro) y "videre" (ver), la clarividencia se traduce literalmente como "ver claro".
En este artóculo, nos sumergiremos en las profundidades de esta facultad psíquica, explorando qué es la clarividencia, sus manifestaciones a lo largo de la historia y los diferentes tipos que han sido identificados por practicantes y estudiosos del mundo esotérico.
Definiendo la Clarividencia
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La clarividencia se define como la capacidad de percibir información fuera del alcance de los sentidos humanos ordinarios, particularmente la vista.
Aquellos que poseen esta habilidad, conocidos como clarividentes, pueden recibir imágenes, visiones o información sobre eventos, personas o lugares distantes en el tiempo y el espacio.
La clarividencia no se limita al plano físico, sino que también puede abarcar dimensiones más sutiles, incluyendo el mundo espiritual o energético.
Manifestaciones Históricas de la Clarividencia
A lo largo de la historia, la clarividencia ha sido un tema recurrente en diversas culturas y tradiciones espirituales.
En la antigua Grecia, por ejemplo, los oráculos eran considerados clarividentes, capaces de recibir revelaciones divinas y prever eventos futuros.
En la cultura celta, los druidas eran venerados por su capacidad de percibir más allá de lo visible, conectándose con las fuerzas de la naturaleza y anticipando acontecimientos.
Asimismo, figuras históricas como Nostradamus, el famoso vidente del Renacimiento, dejaron un legado de profecías que aún capturan la imaginación de muchos.
A través de los siglos, la clarividencia ha encontrado su camino en prácticas esotéricas, místicas y religiosas, revelándose como una capacidad que trasciende las barreras del tiempo y la cultura.
Tipos de Clarividencia
1. Clarividencia retrocognitiva:
La clarividencia retrocognitiva implica la capacidad de ver eventos o situaciones pasadas.
Los clarividentes con esta habilidad pueden recibir visiones que revelan aspectos de la historia que han quedado ocultos al conocimiento convencional.
Este tipo de clarividencia permite explorar eventos pasados, desentrañar misterios y comprender la evolución de ciertos lugares o personas a lo largo del tiempo.
Este tipo de clarividentes son muy populares ya que muchas veces son utilizados por las policías para esclarecer casos, encontrar cuerpos o evidencias cruciales. Uno de estos exponentes es Armando Martí, conocido en Colombia por su trabajo como asesor de la Fiscalía General de la Nación y por haber encontrado los restos del avión del ministro Juan Luis Londoño.
Otro caso de clarividentes que trabajan con la policía es el de Allison DuBois, quien además trabaja como consultora jurídica. Es popular en Estados Unidos por ayudar a resolver crímenes a los Texas Rangers y al Departamento de Policía de Glendale (Arizona).
2. Clarividencia precognitiva:
Contrariamente a la retrocognición, la clarividencia precognitiva permite a los clarividentes ver eventos futuros.
Aquellos que poseen esta habilidad pueden recibir visiones que anticipan situaciones, cambios o acontecimientos que aún no han ocurrido en el plano físico.
La clarividencia precognitiva ha sido objeto de interés y debate, ya que plantea preguntas fundamentales sobre la naturaleza del tiempo y la capacidad de prever el destino.
3. Clarividencia espiritual:
La clarividencia espiritual se centra en la percepción de dimensiones más allá del plano físico.
Los clarividentes espirituales pueden tener visiones de seres espirituales, guías, entidades o energías que no son perceptibles para la mayoría de las personas.
Esta forma de clarividencia se asocia comúnmente con experiencias místicas y revelaciones divinas, sirviendo como un puente entre el mundo terrenal y el espiritual.
4. Clarividencia psicométrica:
La clarividencia psicométrica implica la capacidad de obtener información a través del contacto físico con objetos.
Los clarividentes psicométricos pueden sostener un objeto y recibir impresiones visuales, emocionales o informativas relacionadas con la historia o energía de dicho objeto.
Este tipo de clarividencia sugiere una conexión íntima entre los objetos y la capacidad de leer su "huella" energética.
Un ejemplo de este tipo de clarividencia se puede observar en el reality íntimo La vida después de la muerte, con Tyler Henry, disponible en Netflix. Este medium navega por diferentes casos exponiendo cómo se siente y cuáles son sus procedimientos para conectar con los difuntos y a sus clientes siempre les pregunta si llevan con ellos algún objeto de la persona con la cual esperan comunicarse.
Si se te da bien el inglés, te dejo el Trailer de este minireality de 9 capítulos. En una de esas te entusiasma:
5. Clarividencia mediante sueños:
Algunos clarividentes experimentan visiones en sus sueños.
Estas visiones pueden ofrecer información significativa sobre el presente, el pasado o el futuro.
La clarividencia onírica ha sido un fenómeno documentado en diversas culturas, donde los sueños se consideran portadores de mensajes simbólicos o premonitorios.
Desarrollo de la clarividencia
La clarividencia no se limita a unos pocos elegidos; muchos creen que es una habilidad que puede desarrollarse y perfeccionarse con práctica y disciplina.
Aquí algunos consejos para aquellos que buscan cultivar su clarividencia:
1. Meditación:
La meditación regular puede abrir las puertas de la percepción interior y fortalecer la conexión con la intuición.
La clarividencia a menudo se nutre de un estado mental tranquilo y receptivo, y la meditación es una herramienta invaluable para alcanzar este estado.
2. Desarrollar la intuición:
La clarividencia y la intuición están intrínsecamente vinculadas.
Practicar el desarrollo de la intuición puede abrir canales para recibir información más allá de lo evidente.
Prestar atención a los instintos y corazonadas puede ser un primer paso crucial.
3. Trabajo con cristales y energías:
Algunos practicantes creen que ciertos cristales, como la amatista o la obsidiana, pueden potenciar la clarividencia.
Trabajar con cristales y aprender a sentir y manejar las energías sutiles puede ser beneficioso en el proceso de desarrollo.
4. Llevar un Diario de Sueños:
Mantener un diario de sueños puede revelar patrones o símbolos recurrentes que podrían tener significados más profundos.
La clarividencia a menudo se manifiesta en el mundo onírico, y prestar atención a estos sueños puede ser una forma de cultivar y comprender esta habilidad.
Navegando por las aguas de lo invisible
Los diferentes tipos de clarividencia ofrecen una visión rica y matizada de esta capacidad psíquica, mostrando su versatilidad y su capacidad para abarcar tanto el pasado como el futuro, lo físico y lo espiritual.
Ya sea a través de sueños, meditación o el contacto con objetos, la clarividencia nos invita a explorar las fronteras de lo invisible y a reconocer la vastedad de la experiencia humana que va más allá de lo que nuestros ojos pueden ver.
En un mundo lleno de misterios, la clarividencia sigue siendo una linterna que ilumina el camino hacia lo desconocido.
