Animales guardianes espirituales: El OSO

Oso
Oso | Pixabay

A través del contacto con este imponente guardián se alcanza la sanación y también una conexión más profunda con la Madre Tierra, las energías femeninas nutricias del subconsciente colectivo.

Dentro del simbolismo chamanico y las tradiciones espirituales de múltiples culturas, determinados animales suelen asociarse a la función de guías o protectores del mundo invisible.

Seres poderosos capaces de conectarnos con verdades profundas sobre nosotros mismos y el significado de la existencia.

Uno de los guardianes espirituales por excelencia en estas cosmovisiones es el oso, vinculado al autoconocimiento, la curación interior y los misterios de la vida en cuevas y grutas.

Su figura imponente, su fuerza descomunal, su faceta de sanador al lamerse las heridas y su capacidad de permanecer en letargo profundo durante el invierno, lo señalan como un animal chamánico por naturaleza. Veamos algunos de los principales significados que se le atribuyen en distintas tradiciones:


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Oso pardo - Pixabay

Significados del oso como espíritu guardián

Introspección y autoconocimiento: Al habitar en cavernas, pasar largos periodos en meditación y lamerse en soledad para sanar heridas, el oso representa la introspección, el autoanálisis y el conocimiento de nuestro mundo interior. Invita a la autosanación física y espiritual.

Transformación y renacimiento: Al resucitar luego del letargo invernal, el oso se asocia al ciclo naturaleza-muerte-renacimiento que rige la existencia del cosmos. Simboliza por tanto el poder de la transformación y la capacidad de reinventarnos luego de una crisis o período depresivo.

Valentía y confianza en uno mismo: Por su fortaleza feroz y coraje ante cualquier amenaza, se relaciona al despertar de la fuerza anímica interior. Activa temple, valentía y confianza para defender convicciones y derechos propios, superando temores paralizantes.

Ancestralidad y ADN guardián: Se vincula al despertar de información celular ancestral dormida en lo más profundo del subconsciente colectivo. Contactar al espíritu del oso permite reconectar con visiones y sabiduría de vidas pasadas para recuperar antiguos talentos y memorias transgeneracionales.

El oso como sanador chamánico: Diversos pueblos ancestrales reverenciaban al oso como un maestro espiritual y sanador chamánico de experiencia. Cuando un futuro chamán soñaba o tenía visiones del oso, esto indicaba que era llegado el momento de activar sus dotes curativas y poderes mágicos para servir a su tribu.

Luego de un periodo de iniciación, aislamiento y pruebas físicas/mentales guiado por el espíritu del oso, el aprendiz de chamán integraba esta fuerza o maná (orenda para los iroqueses) a su ser. Esto aumentaba exponencialmente sus capacidades telepáticas, clarividentes y curativas mediante plantas, cantos y ritmos de tambor.

Siguiendo el ejemplo del oso que lame sus heridas, podía luego curar a los demás transfiriendo sobre ellos esta superna energía sanadora. Así, gracias a la tutela del espíritu del oso, el chamán se convertía en un curandero experto, vidente y consejero muy respetado por todos.

Cómo conectar con tu oso interior Algunas formas para conectar con el poder del oso como animal de poder son:

  • Adoptar su valentía y confianza ante situaciones intimidantes
  • Meditar visualizándolo para activar sabiduría ancestral
  • Pedirle sanación espiritual lamiendo las zonas de dolor como él
  • Usar mantras con su nombre para invocarlo como guía
  • Consagrarle un altar con rituales, ofrendas, velas e incienso
  • Soñar despierto que lo abrazas y recibes su fuerza curativa
  • Escuchar tambores que emulen los latidos del corazón o las pisadas del oso

Sin dudas incorporar al oso como protector espiritual otorga coraje, intensifica el brillo de nuestra alma y despierta fuerzas curativas que permanecían dormidas o desactivadas. 

Angela Barraza

Periodista y escritora chilena. Fue panelista del programa VIGILANTES de La Red TV y del programa Combinación Clave de Radio La Clave.  

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